El tiempo corre en contra y los alcaldes de la costa sur de Castellón temen que otro año sin temporal sea soportar demasiado, por lo que urgen a Costas a agilizar trámites e invertir en desarrollar proyectos y obras. Los ayuntamientos de Almenara, Xilxes, Moncofa, Nules y Burriana han dado la voz de alerta porque, un verano más, son ellos la administración responsable de invertir en el mantenimiento de las playas, pero, sobre todo, por la indefensión que prevén ante los temporales marítimos, cuyo impacto en la regresión litoral se va sumando año sobre año.

Como publicó Mediterráneo en su edición de ayer, el Ministerio de Transición Ecológica ha reconocido que los proyectos previstos para la provincia de Castellón están en fase de tramitación y por ahora no se espera el inicio de las obras en ninguno.

Se trata, además, de inversiones de tal calado y envergadura que los ayuntamientos, como indican a este rotativo, no pueden asumir. Contar con espigones que protejan las playas y paseos marítimos resulta clave para la sostenibilidad medioambiental, pero también para la competitividad económica, pues son localidades con un turismo incipiente que pretenden potenciar.

Los alcaldes ponen de manifiesto que hay obras de escolleras que Costas prometió hace más de una década, como las previstas en Burriana, y proyectos cuya tramitación ni siquiera se ha iniciado, como puede ser la protección de las viviendas de primera línea de playa de la zona de Nules.

Las tramitaciones de Costas, según coinciden los munícipes, son excesivamente «lentas y farragosas», en palabras de los propios políticos locales.

TAREAS // Recuerdan que con la crisis económica, además, las administraciones locales comenzaron a financiar la labor de mantenimiento de las playas y sus preparativos cara a las campañas turísticas de verano con aportaciones de arena de los bancos portuarios o la retirada de grava.

Las poblaciones se sienten, en definitiva, abandonadas por Costas, ante lo que consideran que son obras de urgencia pública, puesto que ante un temporal, los recursos con los que cuentan son mínimos y poco pueden hacer. «Queremos tener playas todo el año, no solo tres meses», apuntan desde Moncofa. En Almassora, la macrointervención para la defensa del litoral tardó, pero consideran que ha sido efectiva. Pero las obras, y más con el mar como rival, tienen fecha de caducidad y piden a Costas atención.