El vicealcalde de Castellón, Enric Nomdedéu, y la concejala de Cultura, Verònica Ruiz, denunciaron ayer en rueda de prensa la existencia de un almacén en las dependencias de la Concejalía de Cultura, en la calle Gaibiel, con 772 publicaciones y 61.611 ejemplares de libros editados por el Ayuntamiento en época del gobierno popular que suponen alrededor de “700.000 euros de dinero público” invertido en la edición de los mismos.

“Se encuentran amontonados, en la oscuridad y cogiendo moho”, explicó Ruiz, ya que están “en un cuarto oscuro y sin ventilación”. “De hecho, entre estos ejemplares podemos encontrar hasta un centenar de libros de la obra de Bernat Artola que vamos a tener que tirar a la basura porque la podredumbre ha llegado a tal punto que son irrecuperables”, señaló la edila de Cultura. Junto a los libros también se hallaron más de 4.500 cedés musicales en las mismas condiciones.

“A pesar de existir una ordenanza del año 2012 que contemplaba hasta seis colecciones de libros a través de las cuales se publicaban títulos por parte del ayuntamiento, esta se incumplía constantemente publicando ejemplares fuera de estas colecciones y fijando precios aleatorios”.

un modelo // Por su parte, Nomdedéu señaló que era “un tipo de gestión del patrimonio cultural de la ciudad mediante la cual se editaban libros que no formaban parte de las colecciones incluidas en la ordenanza municipal; se publicaban colecciones de artículos de opinión de determinados periodistas amigos; se abandonaban ejemplares en un cuarto y, en definitiva, se realizaban publicaciones para contentar a los autores, no al lector”.

“Los responsables de este modelo de gestión cultural son el actual portavoz de Cultura del Partido Popular en Les Corts, Miguel Ángel Mulet, y el actual diputado de Cultura en la Diputación Provincial, Vicent Sales”, finalizó. H