Burriana concluye las obras del proyecto de acondicionamiento del refugio antiaéreo del camino de Onda. El concejal de Patrimonio, Vicent Granel, se mostró muy satisfecho por los trabajos finales de esta actuación, que forma parte de la Estrategia Edusi y está cofinanciada al 50% por los fondos Feder. La intervención se ha ejecutado siguiendo el plan redactado por el director de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universitat Politècnica de València, lvan Cabrera, y bajo la dirección del mismo arquitecto y de la arquitecta técnica María Tarancón Franch.

Las actuaciones han consistido en la reconstrucción de las bóvedas de crucería que quedaron inconclusas en los años 30 del siglo pasado, y del doble nicho destruido en 1980. Asimismo, se ha dotado al refugio de un pavimento cerámico de arcilla roja colocado sobre la tierra preexistente. Los trabajos han incluido la instalación de un sistema de ventilación y un llamativo sistema de alumbrado interior que permite cuatro ambientaciones diferentes.

Para Granel «la parte más sorprendente del proyecto es su nuevo acceso, pues la escalera situada junto a la puerta del templo de Sant Josep en la calle San Juan de la Cruz permitirá a los peatones bajar a un primer nivel donde empiezan las rampas históricas». Esta escalera está protegida por un estructura de hierro y madera que cuando está abierta sirve de barandilla «y cuando está cerrada sirve como banco para que el vecindario pueda sentarse a tomar el sol o la fresca», manifestó el concejal del área.

«Esta actuación en el refugio --añadió-- ayudará a agrandar el patrimonio local», como recurso turístico en el municipio.