Las reservas de los hoteles de la ciudad empiezan a ser cada vez más abultadas, pero nada que ver con lo que sucede en otras capitales del país. Y el mejor ejemplo es que pasan los años y la planta hotelera de la ciudad no se mueve. De hecho, y según fuentes del sector, el último hotel que se inauguró en Castellón fue el Bag y lo hizo en el año 2009.
Castellón no abre un hotel desde hace 8 años y, a corto y medio plazo, no hay previsión de que las cosas vayan a cambiar. Al menos, no hay ninguna inversión a la vista. Muy distinta es, por ejemplo, la situación de ciudades como València, Málaga o Madrid que ahora viven una auténtica efervescencia hotelera.
Madrid, por ejemplo, tiene previsto inaugurar 20 nuevos establecimientos en los próximos dos años, mientras que en la capital del Turia el Ayuntamiento acaba de aprobar una suspensión en la tramitación de la concesión de licencias de actividad para nuevos hoteles, después de recibir una docena de peticiones.
