La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, visitó ayer junto al jefe de servicio en Castellón de Facsa, Manuel Breva, y otros técnicos, los pozos municipales de abastecimiento de agua Camí Pedrera y Aljibes, dos de las principales instalaciones que suministran para consumo a la ciudad y que están gestionados por Facsa. Proporcionan el 50% de los más de 45 millones de litros de agua que Castellón utiliza diariamente durante los meses de verano.

El origen del agua con la que se abastece a la ciudad es 100% subterráneo y, según Marco y los técnicos «el suministro está garantizado». Instó, no obstante, a hacer «un consumo racional y lo más eficiente posible», puntualizó.

El Ayuntamiento y la empresa concesionaria Facsa han desarrollado diferentes iniciativas de forma conjunta para preservar este recurso natural y promover una gestión más responsable del agua, como la utilización de agua regenerada y de menor calidad para el baldeo de calles y el riego de jardines. Además, desde la empresa también se han promovido acciones para mejorar la eficiencia energética de estos pozos, ya que el origen subterráneo del agua hace necesario el uso de energía adicional para captar e impulsar este recurso natural hasta la superficie.

En ese sentido, la incorporación de nuevas tecnologías y desarrollos propios han permitido obtener distintivos como la certificación UNE EN ISO 50001 en gestión energética y la UNE EN ISO 14001 en la ambiental.