Nelea, Eva, Martina, Nerea, Andrea, Kriztina, Esther, Rocío, Yalennys... son solo algunos de los nombres de las 19 personas asesinadas en crímenes machistas en Castellón en los últimos 16 años. Aparecen en una trágica lista negra que comenzó a contabilizarse oficialmente en el año 2003 con la muerte a puñaladas de Amparo Ebrí, a quien su novio asestó cuatro puñaladas tras una discusión en Alcalà de Xivert.

La provincia salió a las calles el pasado lunes con motivo del Día Internacional contra la Violencia de Género para condenar el terrorismo machista que en lo que va de año ha sesgado la vida ya a 52 mujeres en todo el país. De norte a sur y de este a oeste, los municipios de la geografía castellonense gritaron Ni una menos en multitudinarias concentraciones. Miles de ciudadanos mostraron su repulsa contra la violencia machista.

Lo hicieron en una provincia que duplica la tasa nacional de crímenes machistas por población --tiene una ratio de 0,69 por cada 100.000 habitantes, la séptima más alta de España--.

El caso de Fabiola

Este 2019 se cumple una década de uno de los crímenes machistas que conmocionaron a la sociedad castellonense, un caso de manual en el que la víctima ocultó durante años el calvario de malos tratos que sufría y acabó asesinada por los celos de él.

Fabiola Pulgarín, de origen colombiano y vecina de Castelló, fue estrangulada por su marido, Domingo Velázquez Rodríguez de Guzmán, en el domicilio que compartían en la calle Juan Ramón Jiménez. La pareja, que regentaba un bar en la calle Río Turia, pasó una noche de las fiestas de la Magdalena en la verbena de una gaiata. Allí, Fabiola habló y saludó a varios hombres, lo que provocó un ataque enfermizo en su asesino, que creyó que tenía un amante. Al llegar a la casa familiar, él la estranguló.

Domingo Velázquez ya había cumplido condena por malos tratos hacia su mujer, quien decidió ir a visitarlo a la cárcel, perdonarlo y reanudar la convivencia. Ella no contó el verdadero motivo por el que ingresó en la prisión ni siquiera a su propia familia.

La Audiencia Provincial de Castellón sentó en el banquillo al asesino y lo condenó a 19 años de cárcel. Pero la suya no fue la única condena vinculada a este terrible caso, pues el pasado mes de febrero la Justicia impuso dos años de prisión al abogado José Javier Sánchez Pérez --letrado de la Asociación Española de Víctimas de Delitos Violentos, Terrorismo y Violencia de Género-- por estafar más de 53.000 euros al hijo de Fabiola, que tenía 20 años y había quedado huérfano. Según el tribunal, el letrado urdió un plan para aprovecharse de sus ayudas sociales.

El 016 es un servicio telefónico de asesoramiento jurídico a las víctimas. No deja rastro en la factura telefónica.