Todas las viviendas de una misma manzana que se construyan a partir de la aprobación del Plan General de Castellón deberán ser de la misma altura. Con ello, el equipo de gobierno busca «regularizar, homogeneizar» un aspecto que hasta ahora hacía que en una misma cuadra coincidieran bloques de viviendas de tamaños muy diferentes, señaló ayer el concejal de Ordenación Urbana, Rafa Simó.

De hecho, según consta en los planos del Plan de Ordenación Pormenorizada (POP) --que ayer comenzó sus 45 días hábiles de exposición pública, que se prolongarán hasta el 8 de noviembre-- solo en algunas zonas, y para edificios que dan a calles determinadas, se permiten alturas diferentes en una manzana.

Este es uno de los aspectos del POP, que detalla el plan general estructural en las zonas urbanas de la ciudad. En él se refleja una «especial consideración hacia el patrimonio», señala Simó, y tiene como objetivo principal «mejorar la calidad de los espacios públicos, el lugar de relación entre las personas». Para ello, se ha buscado «un equilibrio entre el espacio edificado y el suelo público».

Esto se nota en el aumento de la zonas verdes, cuyos desarrollos futuros se busca que acompañen también el de otros suelos dotacionales, como el de colegios.

Aunque Simó y los técnicos Fernando Calduch y Consuelo Leal no entraron al detalle de cada zona, el edil sí que señaló que el barrio de Crèmor es «uno de los sectores donde más cambios» se producen respecto al planeamiento del año 2000. En concreto, en esta área se ha previsto «un vial ancho pero especialmente cuidadoso con el peatón y el ciclista».

De esta manera, a la espera de resolver las alegaciones al Plan General Estructural, que provocarán «cambios llamativos» en el documento, como avanzó Simó, el POP inicia la tramitación ante los vecinos. La intención de los técnicos es que ambos documentos vuelvan a ser expuestos al público antes de su aprobación definitiva, que se prolongará.