El sector hotelero de Castellón experimenta una fase de crecimiento, tras unos años marcados por la ausencia de grandes inversiones. Entre el pasado año y los próximos meses, los empresarios van a destinar más de seis millones de euros de inversión, según los datos recogidos en un informe de la consultora Doubletrade. La inyección económica llega a 15 establecimientos, especialmente con la remodelación integral de dos edificios en Peñíscola, cuyas obras arrancaron el pasado otoño, y que seguirán en los próximos meses. En ambos casos, el importe aportado por los promotores se aproxima a los dos millones cada uno.

El resto de actuaciones corresponde a planes repartidos entre la costa y el interior. Es el caso de cuatro hoteles de Benicàssim, con partidas que van desde los 47.000 hasta los 328.000 euros. También queda reflejada en el informe la cantidad de 600.000 euros para una obra nueva en Benicarló, concretamente en la partida Cervellona, cerca del vial que separa a este término con Peñíscola.

El dinamismo en este segmento también se aprecia con las continuas novedades por parte de promotores. Tal y como adelantó Mediterráneo, un empresario de Benicàssim ampliará el número de camas, con la construcción de un negocio de 54 habitaciones con categoría de cuatro estrellas, en una parcela ubicada entre las playas de l’Almadrava y la Torre Sant Vicent. El propósito del impulsor, Joan Bonet, es que las obras puedan dar inicio en el transcurso de este mismo año, y la apertura llegue durante el 2023, tras un plazo de 24 meses.

TURISMO RURAL / Más allá de la costa se detecta una reactivación en la oferta de turismo rural, como la ampliación de la capacidad de negocios de alojamiento en les Useres y Montanejos, o reformas localizadas en Vilafranca.

Todo este movimiento tuvo como precedente la adquisición de hoteles en Benicàssim y Orpesa en temporadas anteriores, que fueron remozados en profundidad antes de su reapertura.

Una vez finalice este movimiento para renovar la planta y ganar en competitividad, el siguiente reto es la materialización de un macrocomplejo ideado en el entorno de la urbanización la Coma. Un establecimiento de cinco estrellas, destinado especialmente a albergar a deportistas, con más de 60 empleados.

Tanto las iniciativas de rehabilitación como las del incremento en el número de habitaciones pretenden seguir sacando el máximo partido a los meses de mayor actividad, mientras las últimas estadísticas apuntan en Castellón a una ligera mejora en el número de pernoctaciones en los meses de temporada baja.