Una Navidad solitaria y en casa en Castellón. Ese es el escenario que se vislumbra para las próximas fiestas navideñas que, de cumplirse lo estipulado, se celebrarán en mitad del estado de alarma en España. El presidente Pedro Sánchez ha mostrado este domingo en su comparecencia la intención de lograr una prórroga del estado de alarma de seis meses, una medida que necesitará la aprobación del Congreso de los Diputados y con la que el Ejecutivo busca crear un marco legal que permita establecer las medidas excepcionales en la lucha contra el coronavirus evitando los constantes encontronazos legales con los tribunales. De esta forma, el estado de alarma terminaría el próximo 9 de mayo.

Dando completamente por perdida cualquier celebración de Halloween, con poco arraigo tradicional y convertido en muchas ocasiones en una excusa para organizar una fiesta entre la población joven, una de las primeras preguntas que la prensa le ha lanzado al presidente guardaba relación con las Navidades y cómo se verán afectadas por el estado de alarma.

El líder del Ejecutivo no ha dado una respuesta concreta sobre las celebraciones navideñas y cómo el estado de alarma en España influirá sobre las mismas, pero ha destacado que el Ejecutivo "no tiene intención de estar ni un día más ni un día menos con el estado de alarma".

Adiós a festejar las Campanadas en la calle

Por el momento, y según la intervención de Sánchez, se desconoce de qué forma podría afectar la alarma a la Navidad en España. Sin embargo, con las medidas actuales sobre la mesa, estaría prohibido juntarse con más de seis personas en un domicilio o restaurante. Las Campanadas se celebrarían en pleno toque de queda, por lo que sería obligado permanecer en casa.

No obstante, el propio Sánchez ha recordado que el estado de alarma "es un instrumento constitucional en manos del Congreso de los Diputados, así como su prórroga". De hecho, con dos meses por delante hasta Nochebuena, el primer paso a salvar es la aprobación en la cámara baja del estado de alarma de seis meses.

En este tiempo, la evolución de la pandemia de coronavirus en España, la situación epidemiológica y los acuerdos políticos sobre las medidas excepcionales determinarán cómo viviremos las próximas Navidades, irremediablemente marcadas por el coronavirus.