Las escuelas concertadas cierran filas ante un posible veto del Consell a los conciertos en Bachillerato y Formación Profesional que amenaza el futuro de más de 2.600 estudiantes de enseñanzas posobligatorias que cursan estudios en centros privados sostenidos con fondos públicos en la provincia de Castellón. El equipo de dirección de la Conselleria de Educación ha trasladado a las Escuelas Católicas en una reunión que estudian eliminar los conciertos en esta etapa educativa de cara al próximo curso.

Las reacciones no se han hecho esperar. El presidente de la Confederación Católica de Padres de Alumnos de Castellón, José Antonio Rodríguez, apunta que constituye «un ataque más a la libertad de elección del centro que queremos y una clara discriminación económica». A juicio de Rodríguez, «no vemos ninguna razón para su eliminación más allá de la ideológica por parte de la Conselleria de Educación». En ese sentido, se refirió a la situación de los alumnos que, en 4º de ESO, tendrán que abandonar el centro concertado para acabar sus estudios antes de ir a la universidad o a otro tipo de estudios. «Nos parece un atropello», indica. «Vamos a ver las medidas y las justificaciones que hay, cómo y cuáles van a extinguirse si tiran adelante, porque una cosa son intenciones y otra distinta, ejecuciones», señala.

Según los datos aportados a inicio de curso por la Conselleria de Educación, en la provincia hay 942 estudiantes de Bachillerato, 1.612 de FP y 81 de FP básica en centros concertados. La supresión de dichos conciertos afectaría a 16 centros de la provincia.

El portavoz de la Mesa por la Educación, Vicente Morro, pide a los dirigentes de la Conselleria que se planteen las consecuencias de «una medida tan radical como la eliminación de concierto y si han calculado cuántos puestos de trabajo se destruirán y cuántos jóvenes no podrán seguir recibiendo la educación en los centros que habían elegido».

Mientras, desde Escuelas Católicas han expresado su preocupación y han pedido que no se lleve a cabo la medida, que afectaría a 90 de sus centros y a multitud de puestos de trabajo. H