Más de cuatro meses después de que una anciana de 86 años muriera atrapada por una puerta automática mientras alimentaba a los gatos del Hospital Provincial, el centro sigue sin tomar ninguna medida. Ni respecto a la seguridad -aspecto en el que ya avisó que no consideraba necesarias mejoras— ni respecto a la colonia de felinos, que sigue siendo alimentada por usuarios.

Este diario pudo comprobar la presencia de personas que alimentan a los animales en la misma puerta donde falleció la mujer el pasado julio. Asimismo, fuentes sindicales del consorcio no solo lo confirman, sino que aseguran que en los últimos meses la colonia está «descontrolada», pues han detectado que no es ya una sola persona la que la alimenta, sino varias.

Fuentes de la dirección del Provincial reconocieron que el convenio con una entidad protectora que se anunció tras el incidente todavía no es una realidad, pero apuntaron que ya hay «contactos» para adoptar «una solución consensuada». Los sindicatos, por su parte, denuncian que todavía no haya medidas cuatro meses después del trágico suceso.

AGRAVADO // El acuerdo no solo no es una realidad, sino que la preocupación de los trabajadores va en aumento. El representante de CCOO en el centro, Amalio Palacios, asegura que los felinos «campan, más que nunca, a sus anchas» y «se les ha visto comiendo incluso en los jardines interiores». Es por ello que pide poner fin a este «descontrol», pues el problema de salubridad, largamente denunciado, se agrava.

Por su parte, el delegado de CSIF, Vicente Navarro, también exige soluciones a la dirección y apunta que la mejor opción pasa por «cogerlos y entregarlos a una entidad que se encargue de protegerlos», pues esto permitiría poner fin a una situación enquistada sin que los animales sufrieran ningún daño físico.