La empresa gestora del aeropuerto de Castellón, Edeis, negocia para conectar el recinto con Marruecos. De hecho, su director, Alexander Schroll, se reúne este miércoles en Casablanca con representantes de dos aerolíneas marroquís para tratar de cerrar las conversaciones que viene manteniendo. El objetivo prioritario, afirma Schroll, es volar a esta ciudad, considerada la capital económica del país alauí, algo que podría servir además al recinto de Benlloch y Vilanova como «plataforma para conectar con otros países de África y América», afirma.

Pero, además, también se baraja otros posibles destinos en Marruecos, «como Nador o Tánger», a donde no llegan barcos de pasajeros del puerto de Castellón «y esto podría ser una ventaja» para conseguir vuelos regulares.

Y es que el principal mercado al que irían dirigidas estas líneas es la comunidad marroquí de Castellón. No en vano, «hay 17.000» personas con nacionalidad del país alauí empadronadas en la provincia, señala Schroll. En este sentido, el director de Aerocas, Joan Serafí Bernat, recuerda que esta clase de «vuelos étnicos a Europa del Este están teniendo mucho éxito y otro colectivo interesante es el de ciudadanos del Norte de África». En Benlloch ya operan dos aerolíneas este tipo de conexiones, Blue Air a Bucarest (Rumanía), que desde el día 1 ha ampliado a un tercer avión; y Ryanair a Sofía (Bulgaria).

Aunque este nicho de mercado es el principal, lo cierto es que también abriría nuevas posibilidades a los castellonenses para hacer turismo, como sucede con aquellos dos destinos, «y podría ser interesante para la industria cerámica, pero también la química o la agricultura», dice Schroll.

Su intención es que los vuelos operen durante todo el año --«hay mercado», dice-- y espera una respuesta definitiva «a finales de este mes o principios de julio» porque es entonces cuando se definen las operaciones del 2018.