Una de las pocas certezas del brexit es que la aduana pasa a ser inevitable». Son palabras del jefe de la dependencia de Aduanas e Impuestos Especiales de Castellón, Alfredo Pascual. No obstante, este experto también dejó claro durante su intervención en la jornada La empresa española ante el brexit que hay diferentes fórmulas para enfrentarse a este incremento de la burocracia que, necesariamente, implica la salida del Reino Unido de la Unión Europea.

Pascual recomendó a las compañías de la provincia que exporten a este país que utilicen el puerto de Castellón para enviar sus mercancías, pues esta infraestructura «dispone de su propio servicio aduanero acostumbrado a realizar estos trámites con terceros países, que es lo que será Reino Unido tras la desconexión». El mismo funcionario reconoció que hasta ahora el transporte por carretera podía ser más rápido que los servicios marítimos, pero que a partir de ahora PortCastelló puede facilitar mucho los trámites a las empresas. En especial a aquellas firmas de tamaño pequeño o mediano que no están acostumbradas a comerciar con estados no comunitarios.

El director de la oficina del Icex en Castellón, José Luis Peralta, afirmó en una entrevista con Mediterráneo que el tiempo que las empresas esperen en la frontera para obtener el visto bueno de las autoridades supondrá una serie de costes y puso precisamente el ejemplo de los camiones, que con estos parones pueden necesitar una jornada más de lo que es habitual ahora para poder finalizar los envíos.

MÁS TRANSPORTE VIARIO // En la actualidad, el transporte por carretera es mayoritario en la provincia. En el caso de los azulejos, apenas un 30% de las baldosas que el Tile of Spain exporta a la Unión Europea viajan por vía marítima y el 70% restante lo hace por carretera. El ejemplo de los cítricos es aún más evidente, pues el tráfico portuario en envíos a países comunitarios es inexistente y todo se transporta en camiones.