La crisis sanitaria del coronavirus ha golpeado a numerosos sectores de la sociedad: sanitario, económico, educativo y también a la justicia. Los juzgados de Castellón, que antes del covid-19 ya sufrían atascos y falta de medios, se enfrentan ahora a un colapso sin precedentes. El presidente de la Audiencia Provincial, José Manuel Marco, analiza la situación en una entrevista para Mediterráneo.

--¿Cómo valora usted la situación de la justicia castellonense en estos momentos?

--La situación de la administración de justicia en la provincia ya era difícil antes de la crisis del covid-19 y lógicamente ha empeorado. A la presión que supone un funcionamiento insatisfactorio por la desproporción entre medios y carga de trabajo a la que ha de hacerse frente, se suma la paralización de muchas actuaciones y la inevitable suspensión de bastantes juicios.

--La sanidad pública, con importantes recortes durante los años de la crisis económica, se ha llevado la peor parte en esta pandemia. También sucede lo mismo con la investigación, a la que, con presupuestos muy mermados, ahora confían el hallazgo de la vacuna. ¿Le ocurrirá algo parecido a la justicia, que con una falta de medios notable deberá hacer frente a un colapso sin precedentes?

--Soy juez desde hace muchos años y durante todos ellos el discurso siempre gira en torno a la falta de medios. Los asuntos que se judicializan son cada vez más numerosos y complejos, lo que exige un correlativo aumento de medios y aquí creo que se produce un déficit. La tutela judicial no solo es un derecho fundamental plasmado en la Constitución. Un correcto funcionamiento de los tribunales contribuye a la confianza en las instituciones y tiene repercusiones económicas. Según datos del Ministerio de Justicia, a final del año 2019 había más de 4.400 millones de euros en las cuentas de depósitos y consignaciones judiciales de España, 36 millones en las de los tribunales de la provincia de Castellón. Es un dinero inmovilizado a la espera de una resolución judicial.

--¿Ha sido efectivo y productivo el teletrabajo para los magistrados y los secretarios judiciales durante este tiempo de estado de alarma? ¿Han encontrado con problemas tecnológicos? Y si los ha habido, ¿de qué tipo?

--No encuentro aspectos positivos en una situación que ha supuesto y supondrá un drama para tantas personas. Pero nos ha forzado, a jueces y letrados de la administración de justicia, antes secretarios judiciales, a utilizar los medios tecnológicos de que disponemos. Puede decirse que una situación no querida nos ha obligado a mejorar nuestra formación práctica. Ha habido algunos problemas puntuales en el empleo durante este tiempo de los medios tecnológicos, pero no creo que sean destacables. La Conselleria de Justicia ha hecho un esfuerzo importante por solventarlos a medida que se han planteado.

--En la provincia hay un colapso que todos los agentes implicados (jueces, fiscales, abogados, procuradores...) tildan de endémico. Ahora, con el parón debido a la pandemia, se agudiza todavía más. Los sindicatos dicen que costará meses, e incluso puede que más de un año, no mejorar respecto a cómo estábamos, sino volver a ese punto. ¿Está de acuerdo?

--Estoy de acuerdo en términos generales. No me atrevo a aventurar tiempos, pero si la situación era difícil el 14 de marzo, es evidente que no es mejor ahora, ni cuando en unos días se afronte la vuelta a la normalidad. Basta pensar en que se han suspendido muchas actuaciones y en que la vuelta es con unas limitaciones muy importantes en el aforo del edificio en general y de las salas para la celebración de juicios en particular.

--¿Cómo cree usted que debería abordarse el embotellamiento que sufrirá la justicia a partir del próximo mes? ¿Qué medios serían necesarios para abordarla?

--Considero que es fundamental la actitud positiva y la colaboración de quienes trabajamos de uno u otro modo en el ámbito de la administración de justicia, tanto de todos los que prestamos servicio en los tribunales, como de los profesionales del derecho. La de la pandemia es una situación difícil y excepcional que deberemos abordar juntos. A la importancia de los medios materiales para poder afrontar la situación ya me he referido antes.

--En la provincia se han tenido que suspender ya más de 3.000 juicios. Algunos de ellos son por delitos de sangre o abusos a menores, casos que han causado gran alarma social. ¿Cuándo cree usted que podría retomarse la normalidad en la celebración de vistas y juicios?

--Entre el lunes 16 de marzo y el viernes 22 de mayo se han suspendido más de 3.300 juicios. La actividad en lo referente a la celebración de juicios y vistas se retomará progresivamente a partir de esta semana. Si por normalidad se entiende la situación anterior, es tan evidente que de momento no volverá, que ya se habla de una nueva normalidad, que nos hace añorar la que tendremos que llamar normalidad antigua, la de siempre. La administración de justicia también lo acusará y el efecto no será positivo. La disminución forzosa de la cabida de las salas y del edificio hará que no sea posible la utilización que se hacía de bastantes dependencias y entorpecerá la fluidez en la celebración de los juicios; piénsese en la limitación del número de personas en los pasillos, a la espera de su juicio o declaración, en la ventilación y limpieza rápida entre juicios. Encontraremos un punto de fluidez, pero creo que el comienzo no será fácil.

--Uno de los casos más recientes (también suspendido) es el que debía sentar en el banquillo a un entrenador de gimnasia de Betxí acusado de presuntos abusos a menores. No solo se suspendió, sino que la Audiencia decretó la salida de prisión del procesado. Los magistrados explicaron en su auto que no había medidas de seguridad en la sala de vistas para celebrar el juicio y la consellera de Justicia dijo sentir «estupor» por la decisión, le escribió a usted y prometió medios. ¿Cómo máximo representante de la Audiencia, cuál es su opinión sobre la decisión judicial respecto a este caso?

--Como juez y como presidente de la Audiencia no debo valorar la resolución de otro tribunal, nunca lo hago. El tribunal competente valoró la situación y acordó la libertad provisional del acusado, con fianza y con estrictas limitaciones; es una decisión jurisdiccional cuyo control es mediante los recursos procedentes. La decisión de suspender la celebración del juicio está justificada por la falta de instalación adecuada donde celebrarlo en las actuales circunstancias. Además del tribunal de tres magistrados y del acusado, está prevista la intervención y presencia en la sala de vistas del fiscal y otras once partes procesales, más la declaración de sesenta testigos. Se va a adecuar el salón de actos como sala de vistas.

-- El Consejo General del Poder Judicial avala la creación de la Sección Cuarta de la Audiencia, una apuesta personal suya para mejorar el servicio judicial. ¿Confía en que el Ministerio de el visto bueno definitivo? De ser aprobada, cuándo cree que podría ponerse en marcha?

--He pedido la creación de otra sección en la Audiencia Provincial porque pienso que es necesaria; basta ver la evolución de la carga de trabajo. Una vez que el Consejo está de acuerdo, falta contar con el Ministerio de Justicia y la Conselleria de Justicia. La actitud de la Generalitat es positiva. Espero que lo sea la del Ministerio, porque es razonable y muy necesario. Si siempre es difícil aventurar plazos, en la actual situación no me atrevo, aunque ojalá sea cuanto antes.

--¿Teniendo en cuenta la situación actual y todo el trabajo acumulado como consecuencia de la crisis sanitaria por la epidemia, cuántos juzgados más considera que serían necesarios en Castellón? ¿Cuáles?

--A la situación actual se añade el aumento de los pleitos previsible como consecuencia de la crisis del covid-19. Teniéndolo en cuenta, es necesaria la creación de nuevos juzgados en el ámbito civil o de primera instancia, mercantil, social y de lo contencioso administrativo, además de vigilancia penitenciaria.