El conseller de Educación y Cultura, Vicent Marzà, aseguró ayer miércoles que no hay ningún “ataque” a los centros educativos concertados y que desde la Generalitat lo que se está haciendo es “cumplir perfectamente con la ley de conciertos” y garantizar la libertad de las familias.
Durante su visita al Museo de Bellas Artes de Valencia, Marzà acusó a algunos titulares de centros concertados de estar utilizando a las familias y decirles “cosas contrarias a las que son”, y destacó que en el cómputo global solo desaparecen tres unidades concertadas para el próximo curso.
“No hay ataques directos, no hay cierre de centros o niños que se queden sin centro. Todos los niños matriculados en un centro seguirán en ese centro”, afirmó Marzà, quien no ve “problema” en que se acuda a los tribunales porque se encontrarán con que han “cumplido perfectamente con la ley de conciertos”, argumentó el castellonense.
El titular del departamento de Educación señaló que es precisamente esta ley la que obliga a desconcertar aquellas unidades que no alcanzan un número mínimo de alumnos, pero añadió que se trata de unidades y no de centros, que no se cierra ninguno. H
