La dirección general de Medio Ambiente, adscrita a la Conselleria de Territorio y Vivienda, "perseguirá" a todos aquellos ganaderos que viertan sus purines al campo de manera ilegal. Pero no sólo eso. Impondrá sanciones ejemplares.

Para ello, y según fuentes de la propia Conselleria, se intensificarán en las próximas semanas las inspecciones en las principales comarcas de la provincia. "Verter los purines es una práctica ilegal y, como tal, hay que combatirla, máxime cuando existen plantas de tratamiento y gestión. Nosotros lo haremos con el Seprona realizando controles", precisan las fuentes de Conselleria.

Medio Ambiente va a denunciar y las plantas están cerradas, por lo que los ganaderos no tienen más remedio que echar el vertido en el campo. Así, los alcaldes de Salzadella, Sant Mateu y Alboc sser, Víctor Gallego (PP), Manuel Ferreres (PP) y Antonio Querol (PP), respectivamente, pedirán a la Diputación Provincial que abra cuanto antes las plantas de purines. Los tres coinciden en calificar la situación de "muy grave" y desconocen "por qué las instalaciones están sin utilizar, cuando se inauguraron hace ya meses".

A este respecto, Gallego asegura que lleva varias semanas tratando de hablar con el gerente de la concesionaria, Ángel Rey, sin poder hacerlo. Mediterráneo también intentó ayer, durante todo el día, conversar con él, pero rehusó atender las llamadas.

"La planta no funciona y nadie me dice nada, ni siquiera la empresa que tiene la concesión y con cuyo gerente no logro hablar. Todo el mundo se pregunta lo mismo en la comarca: ¿Cuándo estará en funcionamiento la planta? Incluso, algunos tienen la mosca detrás de la oreja por si es una estrategia para pagar el transporte".

El alcalde de Sant Mateu asegura estar igual de desinformado. "No sé nada, ni creo que lo sepa alguien de la zona. Quiero pensar que es que existe un problema puntual, como anomalías en la balsa de almacenamiento", afirma.

Antonio Querol tampoco entiende nada sobre el funcionamiento de la planta de purines. "A mí, me dicen poco. Sinceramente, tengo escasa información. Creo que hay un encargado que trabaja en la instalación de Vall d´Alba y que viene por aquí de vez en cuando. No obstante, los ganaderos tiran el purín al campo", explica.

El vicepresidente de la Diputación y titular de Medio Ambiente, Vicente Aparici, declinó pronunciarse y señaló: "no tengo nada que decir".