«Desde el punto de vista jurídico mi padre está muy tranquilo, pero sorprendido. Por ahora, sabemos poco, pero confiamos en que la semana que viene tengamos constancia de algo más». Son las palabras de Andrea Fabra, hija del expresidente de la Diputación y exdiputada popular en el Congreso, tras el registro policial a la casa de su padre en Orpesa en el marco de una investigación judicial. «Esto nos remueve tiempos muy largos y muy duros. Veo cada día fraudes al fisco por cantidades muy superiores y los condenados no van a prisión. Él cumplió con creces», declaró ayer a este diario. «Después de liquidar todos sus bienes, mi padre no pudo cumplir con todo lo que tenía con Hacienda. Mi madre, sí», sostuvo la hija de Carlos Fabra.
