La Navidad es la época de la solidaridad y, por ello, administraciones y entidades sin ánimo de lucro se han puesto las pilas con el objetivo de que todos los castellonenses, independientemente de su nivel de renta, pasen unas fiestas agradables.

Un ejemplo de ello es la labor que realiza la Fundación Obra Social de Integración del Marginado, más conocida como el comedor del padre Ricardo, que celebró su tradicional cena de Nochebuena y comida de Navidad, en la que decenas de personas con pocos recursos degustaron un menú en el que no faltaron los entrantes, plato principal y los postres navideños.

El encuentro tuvo lugar en las instalaciones de la fundación, situadas en los alrededores del cuartel militar Tetuán 14, aunque el padre Ricardo negocia con el Ayuntamiento una ubicación más céntrica para el comedor.

COMEDOR PARA MENORES // En paralelo, el consistorio también abre durante estas fiestas un comedor para menores en riesgo de exclusión social en el que, además, se ofrecen actividades de ocio para niños de entre 3 y 15 años.

La alcaldesa, Amparo Marco, y el edil de Bienestar Social y Dependencia, José Luis López, destacaron que la campaña, que se realizará en los centros educativos Castalia, Cervantes y Sebastián Elcano, beneficiará a 135 pequeños. El servicio se ofrecerá durante los ocho días lectivos de las vacaciones, esto es, del 27 al 30 de diciembre y del 2 al 5 de enero.

‘UN NIÑO, UN JUGUETE’ // Además de la alimentación, durante estas fechas también es importante que los niños tengan regalos con los que jugar. Ese es el objetivo de la campaña Un niño, un juguete de la Diputación de Castellón. Es el sexto año en el que la institución que preside Javier Moliner reparte centenares de juegos infantiles entre los niños más necesitados de toda la provincia.

Y junto a la comida y el ocio, la tradición. La Basílica del Lledó organizó su tradicional y muy concurrida misa solemne, oficiada por el prior, Josep Miquel Francés, que estuvo acompañado por la rondalla Els Llauradors.