La junta directiva de la Confederación de Empresarios de Castellón (CEC) decidirá mañana, en su reunión prevista a las 19.00 horas, el futuro de la organización y previsiblemente optará por una estrategia para que sea viable. En el orden del día figura examinar la propuesta de presupuestos para este 2016 que llevará a la reunión la gestora, tras perfilar hoy el borrador final. Un documento económico en el que se ha estado trabajando estos meses y que todo apunta será una cuantía bastante inferior a la de los últimos ejercicios, dada la delicada situación económica de la patronal castellonense, a un paso del concurso de acreedores.

El presidente de la actual gestora de la CEC, Néstor Pascual, explicó que entre los puntos a debatir en la jornada de mañana figura, además del presupuesto del 2016; la auditoría correspondiente al 2015, «a punto de acabarse»; y los estatutos.

Desde la gestora consideran que en el documento presupuestario figuran los números claros, pero la última palabra sobre la aprobación la tendrá la junta directiva, que agrupa a diferentes sectoriales. Fuentes empresariales indicaron que no se van a subir las cuotas a los socios ni se ajusta más la plantilla, que ya se reestructuró. Será, eso sí, un presupuesto «de mínimos» y «cuando se pueda ya se mejorará». Una «posibilidad» que no se descarta es que la CEC se declare en concurso de acreedores --el límite es el 31 de octubre--, lo que le permitiría negociar el pago de su deuda hasta ganar solvencia y sería «viable». «Lo importante -según resaltan-, es que Castellón y sus empresarios tengan una representatividad real». H