La portavoz del grupo municipal popular en el Ayuntamiento de Castelló y candidata a la alcaldía advirtió ayer que el derribo de la cruz del Ribalta no solo puede ser «un abuso de poder y una incorrecta aplicación de la ley de Memoria Histórica, sino que además supondrá un atentado contra la conservación del patrimonio histórico, artístico y cultural de la capital de la Plana».

Carrasco se refirió así al hecho de que el monumento es obra de Francisco Maristany y Vicente Traver Tomás, «dos de los nombres más reconocidos de la ciudad», que cuentan ya con proyectos protegidos y de alto valor artístico. «Un extremo que se ha conocido ahora, cuando desde el grupo municipal popular hemos accedido al expediente completo y hemos podido analizar la documentación», indicó la portavoz de los populares en Castelló.