El Partido Popular de Castellón volvió a reclamar ayer al Consell que frene de una vez la «asfixia» a los ayuntamientos de la provincia. La secretaria general del PPCS, Elena Vicente-Ruiz, reivindicó de forma directa al conseller de Hacienda, Vicent Soler, en un encuentro que mantuvieron, que «la mejor forma de hacer autonomía, de hacer Comunitat y de respetar a la provincia es pagando lo que se debe». No en vano, la deuda de la Generalitat con los ayuntamientos de Castellón supera los 30 millones de euros, lo que está provocando, dice el PP, «graves problemas a las Administraciones locales». «Si a un ayuntamiento se le debe el 40% de su presupuesto, es lógico que tenga problemas», afirman.

Los populares insisten en que no solo hay tensiones de tesorería, sino que cada vez hay más problemas para pagar a los proveedores y para cumplir con los compromisos de los alcaldes, sobre todo de los más pequeños. «Pese a que no pagan, sí tienen para sus caprichos, para tener un récord de asesores y subirse los sueldos», critica.

La secretaria general advierte que «desde el PP vamos a reclamar por todos los medios el dinero que se debe», ya que «es curioso que en la provincia, donde el PP es la fuerza que más alcaldías tiene --65--, se incremente la deuda a los ayuntamientos». «Estamos hablando de pagar los planes de empleo, la dependencia y cuestiones básicas», lamentan.