La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, y el portavoz adjunto, Juan José Pérez Macián, denunciaron ayer que “lo que la izquierda llama reorganización y reestructuración no es más que recortes y mala gestión de la Conselleria de Sanidad en Castellón”. Los populares aludieron al “montón de problemas acumulados en los últimos meses en la ciudad, tales como demorar sin explicación el proyecto del centro de salud del Raval Universitari o el malestar de los usuarios de los centros de salud de Palleters, Rafalafena y Fernando el Católico por el cambio de médicos y el retraso en la citación para pruebas médicas”.

Carrasco hizo referencia al caso de un paciente que “ha estado dos semanas esperando a que le dieran cita para hacerse una ecografía porque el médico se jubiló y no tienen sustituto”. “A esto se le llama nula planificación y gestión ineficaz”, manifestó.

Los ediles también reseñaron problemas ocasionados por el cierre de la unidad multisensorial de atención a los niños con daño cerebral de la Fundación Borja Sánchez y a la intención de desmantelar el Centro de Información y Coordinación de Urgencias del Hospital de la Magdalena.

“Los castellonenses no tenemos por qué sufrir estos agravios y por ello tanto los concejales como los diputados autonómicos y los diputados provinciales del PP hemos presentado una batería de iniciativas instando a la Conselleria a remediar esta situación. La salud es lo más importante”, reseñó Begoña Carrasco. H