Las setas están de moda. Variedades como el robellón, el boletus edulis o ous de reig mueven cada otoño a decenas de aficionados y ahora también conquistan las cocinas de los mejores restaurantes de la provincia. Porque si hay algo que se repite octubre tras octubre son las jornadas gastronómicas dedicadas a las setas. Y cada año son más populares.

Desde este mismo fin de semana y hasta el 27 de noviembre, un total de 13 restaurantes de siete municipios del interior (Cinctorres, Forcall, Fredes, Morella, Olocau del Rey, Vilafranca y Zorita) acogen las quintas jornadas gastronómicas de las setas, carnes y productos del otoño de Els Ports. Los platos principales contarán con la presencia de carnes de la comarca (cordero, ternera, jabalí, perdiz, codornices...) que irán acompañadas de variedades de setas como robellones, girgoles, camagrocs, ceps o llanegues. Los precios de los menús oscilan entre los 15 y los 32 euros.

La alta cocina también se rinde a las setas de Castellón y lo hace de la mano del chef Miguel Barrera. El cocinero con una estrella Michelin ha programado en su restaurante ReLevante, ubicado en el hotel NH Mindoro de Castellón, unas jornadas gastronómicas especiales, con la micología como eje, y que tendrán lugar del 18 de octubre al 5 de noviembre.

Quien también dedican todo un mes a las setas es el restaurante Mesón El Pastor, en Morella. «Participamos en las jornadas de Els Ports de la Diputación y, en noviembre, dedicamos el mes a las setas», explica su responsable Raquel Ferrer, que dice que en su despensa ya cuenta con robellones, llengues de bou y trompetas.

POCAS SETAS EN EL MERCADO // Si uno tiene mono de robellón, otra opción es ir a la frutería y comprar un puñado de hongos para cocinarlos a la plancha o freírlos con ajos. La mala noticia es que a estas alturas de octubre encontrar bolets en cualquier establecimiento especializado de Castellón es complicado. O mejor dicho, casi resulta imposible. Hay pocos y los escasos que se venden en la provincia proceden de países como Hungría, Rumanía e Italia o de provincias como Soria, Burgos o Guadarajara.

Se pregunte donde se pregunte la respuesta es la misma. «Este año, de momento, no tenemos. Hace una semanas compramos unos cuantos, pero nos tocó tirarlos porque estaban llenos de gusanos», apunta la responsable de un puesto de frutas del mercado central de Castellón.

En Vila-real la respuesta es idéntica. «No tenemos. Hay clientes que nos preguntan. Esperemos que en las próximas semanas el mercado dé un vuelco». H