Día de regalos. Los Reyes Magos llegaron cargados a la provincia de Castellón e hicieron realidad los sueños de miles de niños, que se fueron pronto a la cama en la noche del sábado para no entorpecer la labor de Sus Majestades en el reparto.

Ilusión desbordante en los hogares ante los presentes que Melchor, Gaspar y Baltasar dejaron a los pies del árbol de Navidad en la mayoría de los casos, y felicidad inmensa al ir destapando los paquetes que contenían los más preciados tesoros esperados.

No faltaron a su cita con ninguna casa. La grey infantil despertó con la alegría de saber que sus peticiones habían sido concedidas.

A primera hora de la mañana muchos pequeños estaban disfrutando en la calle de sus obsequios. Caras risueñas e iluminadas en una jornada de emociones. Desde consolas a los juegos de mesa, muñecos de las series televisivas, clásicos de Disney, los howerboard, réplicas de iconos y complementos de Star Wars...Todo un compendio de fantasía.

Y, jornada de tradiciones, como la del reparto de juguetes con la tradicional vara para alcanzar los balcones de las casas en Vila-real, la entrega personal de regalos a muchos niños de Benicarló en el Almacén del Mar, informa María José Sánchez, o la Plegà de Reis de Figueroles, datada en el siglo XIV, que busca recaudar fondos para la iglesia, mediante la donación de alimentos y productos típicos que se subastan, recogiéndose ayer más de mil euros, informa Héctor Gozalbo. H