El conseller de Educación, Vicent Marzà, visitó este miércoles el proyecto pedagógico de patio del colegio Enric Soler i Godes de Castellón. Un "ejemplo de patios activos que pretendemos establecer de manera generalizada en los centros educativos valencianos", tal y como señaló Marzà.

Entre las zonas y los elementos que forman el patio del centro se encuentra un rocódromo, una zona montañosa con cerros, riego y árboles, un río, una hidrosiembra, un arenal delimitado con madera, una zona de juegos, doble rampa, zona de tablas y asientos, un sombreador y un huerto.

Se han tenido en cuenta las propuestas del alumnado, de los maestros, de padres y madres, de manera que se ha conseguido crear un espacio activo que ya es un referente para otros centros educativos", ha explicado Marzà, y ha añadido que "cada vez son más los centros educativos como el Soler i Godes que están llevando a cabo proyectos innovadores de patios y que se presentan a nuestras ayudas de innovación. De hecho, solo el curso pasado dimos ayudas para proyectos innovadores de patios activos a 95 centros educativos".

Para hacer realidad este proyecto, el CEIP Enric Soler i Godes participó, junto a otros centros, en diferentes formaciones relacionadas con la coeducación y los espacios educativos y en un curso desarrollado por la experta en patios escolares Inara Hasanova.

Para la construcción del patio, el centro ha dispuesto de una inversión de 310.000 euros. Marzà ha querido destacar que "mediante el plan Edificant los ayuntamientos nos pueden solicitar actuaciones para rediseñar patios como el que hoy visitamos y animamos a los consistorios a que lo hagan, puesto que desde Educación de la Generalitat queremos invertir en hacer realidad patios como este en los centros educativos valencianos".

Un patio vivo

La filosofía del patio del CEIP Enric Soler i Godes se basa en la realidad natural que rodea a Castellón, como el río Sec, el Desert de les Palmes y la Marjaleria.

En el patio se han levantado unas montañitas con tierra vegetal y ágoras naturales ataludados con cimas de diferente altura, que dan vida a árboles frutales autóctonos, arbustos, bosque mediterráneo, plantas aromáticas y árboles de ribera. Entre las montañitas también se disponen tubos subterráneos, y en uno de los cerros nace el río Sec, que dispone de una toma de agua que solo se abre cuando juega el alumnado.

La hidrosiembra es el área en la que se mezclan semillas para césped de leguminosas con gramíneas, agua y humus de fibra vegetal, entre otros. Además, hay una zona destinada al huerto donde se plantan verduras y hortalizas, y un rincón de juego simbólico formado por cajas de fruta, fogones y una balanza.

En una pared del aulario de infantil se ha construido un rocódromo horizontal para que los pequeños puedan practicar escalada sin peligro. Entre los elementos de juego también se encuentran dos arenales, varias construcciones elaboradas con madera y troncos y una zona de hamacas.