El presidente del grupo Pamesa, Fernando Roig, no quiere perder ni un minuto en comenzar a sacar el máximo rendimiento a TAU, la compañía que ganó por venta directa el pasado viernes tras la subasta convocada por el juez del Mercantil número 1 de Castellón con vistas a lograr su continuidad y, con ella, la de sus 143 trabajadores para la que hizo una oferta global de 25 millones de €. Tal es así que, ayer mismo, el propio Roig visitó, junto a su equipo de directivos de Portovan SL, las instalaciones de TAU, en lo que fue su primera toma de contacto con su nueva compañía. E hizo un anuncio: el 1 de junio estará a pleno rendimiento.
El empresario llegó a la planta de la antigua Taulell SL a las 12.30 horas. Llegó acompañado del director financiero de Portovan SL, Miguel Pérez; y el abogado del Grupo Pamesa, Ramón Benlloch. Allí fue recibido por el director financiero de TAU, José Luis Planell; y el director general de TAU, José María González. También participó el administrador concursal, Roque Gámbaro. Posteriormente, se citó con miembros del comité de empresa, que preside Óscar Pascual; y el secretario del mismo, José Antonio Cubertorer.
A TODA MÁQUINA // Según trasladó, sus planes pasan por que “el día 1 de junio estén en marcha los cuatro hornos --ahora son dos--, a máxima capacidad productiva”, según trasladó el comité de empresa al conjunto de la plantilla. Ello conllevará “una modificación de los horarios en la jornada laboral en todas las secciones de producción: triple turno, de lunes a domingo”. Y desaparece la actual sección de pulidoras, por el elevado coste de las reparaciones, ya que para los nuevos formatos se rectificará en seco.
Y, tal y como prometió, el 1 de junio “nos abonará las cantidades que se nos adeudan”, mientras que en la primera nómina de Portovan SL, “se aplicarán los aumentos reconocidos en el nuevo convenio sectorial, con carácter retroactivo de enero 2015, aún sin estar publicado” y “los correspondientes atrasos”, “accediendo a nuestras peticiones”. H
