La Romeria de les Canyes de Castellón, acto central de las fiestas mayores de la capital de la Plana en el tercer domingo de Cuaresma, avanza para su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC). El Boletín Oficial del Estado (BOE) de ayer recogió publicada la ampliación de toda la documentación que faltaba en el expediente para alcanzar el título, y que garantiza su protección como patrimonio cultural inmaterial.

Un trámite administrativo que significa avalar «la realización de labores de identificación, descripción, investigación, estudio y documentación con criterios científicos» de la anual peregrinación al Castell Vell de la Magdalena y que, de esta forma, está a punto de conseguir este sello de excelencia con el objetivo de preservar y garantizar la conservación de cada uno de los ancestrales rituales que dan forma a una peregrinación vivida con intensidad por los castellonenses.

Del mismo modo, el Ayuntamiento de Castellón, con la puerta abierta del BOE y su publicación para alcanzar la distinción deberá «incorporar los testimonios disponibles a soportes materiales que garanticen su protección y preservación», así como «velar por el normal desarrollo y la pervivencia de esta manifestación cultural, y tutelar la conservación de sus valores tradicionales y su transmisión a las generaciones futuras». «Este es un paso más para el reconocimiento y la protección de una de nuestras señas de identidad en la que, además, participa de forma masiva toda la ciudadanía durante las fiestas fundacionales», ha señalado la concejala de Cultura, Verònica Ruiz, a la hora de valorar la publicación en el BOE.

TRABAJO // La edila reconoció «el trabajo llevado a cabo por el equipo de gobierno, tanto des de la Concejalía de Cultura como desde la de Fiestas, y por la Conselleria, para dotar a nuestros activos culturales del valor y el reconocimiento que merecen».