La consellera de Sanidad, Carmen Montón, señaló ayer que el reciente fallecimiento de un bebé por tosferina en Castellón es un “caso excepcional”, un “hecho desgraciado”, motivo por el cual había transmitido sus condolencias a la familia. En declaraciones a los periodistas, la consellera reiteró que la madre del niño estaba vacunada contra la enfermedad, de manera que la Comunitat “lo está haciendo bien”, ya que desde enero del año 2015 se está vacunando a todas las mujeres.

EFECTIVIDAD AL 80% // En la Comunitat se comenzó a vacunar a embarazadas al estimar que se trata de la mejor medida de prevención para los recién nacidos (que adquieren la inmunidad a través de la madre), ya que pueden sufrir las peores consecuencias de la enfermedad.

La Conselleria tomó la decisión de dar prioridad a la embarazadas porque en los últimos años se ha producido un incremento de la incidencia de la tosferina en niños muy pequeños y el periodo crítico es entre los 0 y los 2 meses, que es cuando puede llegar a ser grave. Aunque las vacunas tienen una efectividad aproximada del 80%, Montón declaró que la comunidad científica “sabe que existe un porcentaje muy bajo” en el que pueden fallar, cosa que, como ha añadido, “nos ha sucedido a nosotros en Castellón”. H