El recién reelegido secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, no quiso valorar ayer al detalle la situación del partido en la provincia tras el XIII Congreso nacional del PSPV y el camino que se abre ahora cara al cónclave castellonense, aunque sí dejó caer algunas estimaciones. «Hace solo una semana que terminó el congreso y ahora no voy a hacer valoraciones del partido socialista», aseguró. «En estos momentos estamos en la disposición de intentar abrir una nueva etapa y falta todavía mucho tiempo para que el proceso provincial se produzca», apuntó. Cuando sea, remarcó el secretario general, «respetaré la libertad de cada militante e intentaré buscar espacios de diálogo y de consenso».

Preguntado directamente por la candidatura para liderar el PSPV provincial lanzada por el alcalde de Vila-real y portavoz socialista en la Diputación, José Benlloch, y la posibilidad de la confección de otras listas alternativas, Puig no se manifestó.

Como ya ha recogido este periódico, todo parece indicar que el PSPV de Castellón arranca el camino hacia su congreso de otoño, dividido. Tras el anuncio de Benlloch, que adelantó este medio el lunes, el resto de dirigentes socialistas «de diferentes sensibilidades del partido» se han movilizado durante esta semana, sondeando entre sus colaboradores la posibilidad de constituir candidaturas alternativas.

ALTERNATIVAS // Por ello, es unánime la idea de que el proceso castellonense, que se abrirá el próximo septiembre, contará con dos, tres o incluso cuatro listas, de lo que dependerá el papel que desempeñe el actual secretario provincial y miembro de la ejecutiva nacional, Francesc Colomer.