Las fiestas patronales de Burriana vivieron ayer su jornada taurina más intensa, con la suelta de cuatro toros cerriles más otros dos de corro. Además, los niños disfrutaron de su cita favorita, con el encierro infantil ofrecido por la compañía Bou per la Vila, con el patrocinio del Ayuntamiento de Burriana. Los menores y sus padres se deleitaron con los encierros, capeas, recortes y toros de agua, en una cita que estuvo llena de sorpresas y diversión.

La actividad taurina para los nayores comenzó a las 13.00 horas con el primer cerril, un ejemplar de la ganadería de Ana Romero patrocinado por la peña Els Braus. El astado dio juego y no notó la insistencia de los rodaors que se congregaron por la tarde.

Cuando llegó el turno de Pájaro, de Núñez del Cuvillo, ofrecido por la peña El Bou, este realizó una gran salida en la plaza del Ayuntamiento, lugar al que regresó tras recorrer El Pla. Los quiebros fueron una constante y el animal acabó agotado en quince minutos. La tarde la cerró Peluquero, un ejemplar con espectaculares pitones de Murteira Grave que también dio juego, aunque aprendió rápido y eso obligó a los rodaors a estar atentos y lucirse menos. Lo patrocinó Els Braus.

Ya por la noche se emboló el cuarto toro cerril de la jornada, de Javier Molina, patrocinado por la peña El Bou. Este y otros dos toros de corro fueron embolados por sendas tres cuadrillas de emboladores de la localidad. H