El aceite de oliva de Viver es el gran protagonista --aunque no el único-- de la XVIII Feria del Aceite que durante este fin de semana se celebra en la localidad. El llamado oro líquido y los múltiples artículos que se producen con su contenido, como patatas fritas, buñuelos, ajoaceite o helado, llenan las paradas instaladas en el paraje natural de la Floresta.

Al evento no faltan las empresas de elaboración de creaciones artesanales propias de la comarca y los expositores de maquinaria agrícola. El diputado provincial y responsable del área de Desarrollo Rural, Pablo Roig; y el alcalde de Viver, Vicente Martín, cortaron ayer la cinta de inauguración en presencia de las reinas de las fiestas de la población, Gema Aliaga e Inmaculada Moliner. Todos ellos estuvieron acompañados en el acto por el diputado por Segorbe, Juan A. Cases; los alcaldes y representantes municipales de Soneja, Jérica, Navajas, Teresa, Pina de Montalgrao y Vall de Almonacid, entre otros.

En este encuentro, Roig resaltó la belleza del paraje donde se celebra la cita ferial, la Floresta, un espacio natural de 40.000 metros cuadrados que, según el diputado, «es la envidia no solo de nuetsra provincia, sino también de la Comunitat Valenciana».

Por su parte, el primer edil de Viver quiso dar las gracias a la Diputación de Castellón, a los organizadores, a la Cooperativa de Viver, las amas de casa de la población y las asociaciones. Asimismo, aprovechó la jornada para homenajear a Vicente Monleón El Seco, un auténtico especialista en la elaboración del ajoaceite que durante muchos años estuvo presente en la feria, mostrando su habilidad en la cocina con esta receta tan arraigada en la gastronomía de la autonomía.