El pleno del Ayuntamiento de Peñíscola aprobó ayer la salida a exposición pública del plan de reforma interior del área de influencia del casco antiguo. Esta zona abarca una serie de edificaciones situadas fuera de núcleo amurallado, pero que, por su proximidad al mismo, influyen en su visión, por lo que requieren de una norma que las adapte a los criterios del plan especial de protección del núcleo histórico.
El concejal de Urbanismo, Romualdo Forner, indica que este documento «ya tuvo un primer periodo de información» y, tras recibir una serie de alegaciones, han realizado «diversos cambios, que también deben pasar por este procedimiento burocrático».
CASOS / El trabajo definitivo deberá determinar, en el caso de reformas estructurales o el derribo de casas para construir obra nueva, qué tipo de condiciones deben seguirse en aspectos como el número de alturas, el uso de materiales en el exterior o los colores empleados en la fachada. «Básicamente son los mismos puntos que en la versión anterior, aunque especifican aspectos como que la regla general es de planta baja más dos alturas», detalla el edil, así como indicaciones sobre las cubiertas a instalar.
Forner resalta que el plan «está hecho siguiendo las directrices de los técnicos de la Generalitat», en función de las normas de protección del casco antiguo.
Por otro lado, la sesión dio el visto bueno a una propuesta de adhesión para pedir más atención sanitaria a pacientes de fibromialgia y otra para crear un centro ocupacional comarcal.
