El alcalde de Vinaròs, Enric Pla, deberá comparecer el 18 de septiembre ante el Juzgado de Instrucción número 2 de la ciudad para declarar por los tres delitos de los que se le acusa tras impedir, el pasado año, la celebración de una velada de boxeo en las instalaciones deportivas municipales. Los cargos tienen que ver con una presunta prevaricación administrativa, además de la incitación al odio y motivos de discriminación ideológica.
En un primer momento, el consistorio otorgó la autorización para esta actividad, que contaba con la ayuda de la Federación Valenciana de Boxeo. La suspensión llegó al conocer que uno de los principales patrocinadores era una empresa de seguridad, a la que el munícipe acusó de promover actitudes violentas. Como consecuencia de ello, la compañía interpuso las acciones legales que llevarán a Pla a declarar.
