Cerca de una tonelada de confeti se utilizó ayer como arma arrojadiza en la colorida y divertida batalla que tuvo lugar por la tarde, en el marco del desfile de carrozas.

Junto a la reina de las fiestas, Anna Redó, sus cortes de honor, representantes de la Junta Local Fallera y de otras entidades, también participaron en el espectacular y alegre cortejo cerca de una docena de dignatarias festeras de varios municipios del entorno. Entre ellas, las llegadas de Sant Jordi, San Rafael, Traiguera, la Salzadella, Càlig, Peñíscola, Santa Magdalena, Cervera y Vinaròs.

A continuación, los vecinos pudieron disfrutar del show de Pelina y más tarde, empezó el tradicional concierto de habaneras en la playa del Morrongo, a cargo del grupo Xaloc. El disparo de un magnífico castillo de fuegos artificiales sirvió de colofón final de las fiestas para el deleite de todos los asistentes. El evento corrió a cargo de la Pirotecnia Tomás, en la escollera del puerto.

La jornada de ayer puso la guinda a 10 días de celebraciones en Benicarló para rendir honores a Sant Bertomeu, los santos Senén y Abdó y Santa Maria del Mar.