Las Concejalías de Policía y Brigada Municipal del Ayuntamiento de la Vall d’Uixó han trabajado de manera coordinada para retirar las pintadas y los carteles xenófobos y racistas que aparecieron el viernes en varios puntos de la ciudad. De este modo, operarios municipales han trabajado a contrarreloj para intentar que no quede rastro de una pintada de grandes dimensiones realizada junto a la nueva mezquita, que se inaugurará en las próximas semanas.

Asimismo, los trabajadores han quitado los carteles de la misma índole que se colocaron en uno de los muros de la calle Octavi Ten. Con esta actuación, el Ayuntamiento de la Vall quiere dejar constancia de su total repulsa contra estos hechos, que ya ha anunciado que llevará ante la Fiscalía, una vez la Policía Local realice el informe oportuno, al considerar que puede tratarse de un delito de odio.

Tanto el escrito Stop islamización de Europa como los carteles aparecieron el pasado viernes ante el estupor del consistorio, ya que el pasado mes de noviembre también se hicieron unas pintadas sobre el mural que acababan de pintar los jóvenes que integran la asociación de alumnos Welcomes Refugees Benigasló. De todos modos, desde el consistorio reiteran que se trata de «conductas aisladas porque la Vall es un pueblo solidario y acogedor» y muestran su apoyo a la comunidad musulmana que vive en la localidad.

Además, el primer teniente de alcalde y concejal de Servicios Sociales y Participación Ciudadana, Antoni Llorente, ya lamentó el viernes que en los mismos carteles aparecieran las siglas de un partido político, así como un número de teléfono.

En cuanto a la pintada, esta se realizó en la nave contigua a la mezquita que la comunidad musulmana de la ciudad está construyendo en la avenida Europa, cerca del polígono la Vernitxa. Se trata de un gran edificio de 480 m2, con capacidad para más de 500 musulmanes, por lo que se prevé que acudan practicantes de esta religión de todas las localidades vecinas. El nuevo espacio albergará, además, unas aulas en uno de los extremos de la sala para ofrecer clases de árabe y español. Con los años, existe la posibilidad de ampliar el edificio y levantar tres plantas. La obra ha sido realizada durante varios años por voluntarios.