La Conselleria de Sanidad no se plantea "en absoluto" decretar el uso obligatorio de la mascarilla en espacios públicos al igual que ya se hace en Cataluña, pero no descarta aplicar el confinamiento quirúrgico de una parte de la población si se produce un contagio social por coronavirus para tratar de "encapsular" el rebrote y evitar que se extienda.

Así, lo ha señalado este jueves la consellera Ana Barceló en rueda de prensa para informar sobre las medidas adoptadas en relación con la nueva normalidad en la Comunitat Valenciana.

Al respecto, ha explicado que la conselleria de Sanidad "no contempla en absoluto" el uso obligatorio de la mascarilla como en Cataluña ya que considera que es una medida que no es necesaria dada la actual tasa de contagio de la Comunitat: 1,72 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 7 días frente a 4,99 casos de media nacional.

Por contra, sí que se recurrirán a "todos los mecanismos" posibles para no perder la trazabilidad de un brote si hay un contagio comunitario, entre ellos el confinamiento de una parte de la población como ha ocurrido en Lleida para tratar de "encapsular" el repunte.

No obstante, ha recalcado que todos los brotes que se han registrado en la Comunitat Valenciana son familiares y no sociales, incluido el de Castelló, que afecta a los miembros de "tres familias que se reunieron para celebrar San Juan y que además se produjo como consecuencia de una persona que vino de Lleida, por tanto es un caso importando".

De este modo, se dará el paso de aplicar un confinamiento quirúrgico cuando se detecte un contagio social que "impida hacer un seguimiento o cuando se desconozca el paciente cero, que no es la situación actual de los brotes de la Comunitat", para tratar de "encapsular" el repunte y que no se extienda. "Entonces sí que se puede utilizar todos mecanismos para que ese brote no traspase y pase a ser mayor, pero ahora no es el caso", ha insistido.

Barceló ha confirmado que no se detectado ningún brote surgido de alguna fiesta de jóvenes, aunque ha lamentado "las imágenes nada gratificantes que se han visto de relajamiento de medidas".

PRTOCOLOS PARA INMIGRANTES Y TURISTAS

Asimismo, ha señalado que la conselleria ofrece espacios seguros donde poder pasar la cuarentena a las personas que no tengan una residencia en la que se garantice que pueda cumplir con las medidas de aislamiento y ha constatado que esta situación afecta de forma puntual a los temporeros.

En ese sentido, ha informado de que se está ultimando con Delegación de Gobierno unos protocolos específicos de actuación ante casos positivos de turistas, de inmigrantes que llegan en pateras o si finalmente entra en marcha la operación paso del estrecho.

No obstante, ha recalcado que hasta el momento no se ha detectado ningún caso positivo de turistas, cuya llegada a través de los aeropuertos es del 40%. Al respecto, ha recordado que junto a Sanidad Exterior ya se ha puesto en marcha un protocolo para los viajeros internacionales que establece un control primario en el país de origen, donde deben rellenar un formulario que se incluye en un código QR para incorporar la información a la base de datos española cuando entran en nuestro país.

Asimismo, los turistas deben pasar por unas cámaras térmicas y un segundo control donde personal sanitario determina si presentan algún síntoma. En ese caso, se les lleva a una sala donde se les realiza una prueba. Si da negativo seguirá hasta su destino pero si es positivo se determina qué medida adoptar y si es necesario su ingreso.

TERRAZAS AL 100% DE OCUPACIÓN

En lo que se refiere a los bares, restaurantes y ocio nocturno, las nuevas medidas aprobadas por la Generalitat establecen un aforo máximo del 75 % si el servicio se ofrece en el interior del establecimiento y del 100 % si se produce en terrazas al aire libre. El mismo aforo (el 75 %) se contempla para cines, museos y teatros.

En las actividades de ocio dirigidas a niños y jóvenes, el Consell diferencia entre si éstas se realizan al aire libre o en espacios cerrados. En el primer caso, el máximo de participantes será de 300 personas distribuidas en grupos de hasta 20, incluido el monitor o monitora (antes los grupos eran de 15), mientras que si dichas actividades tienen lugar en recintos cerrados deberán alcanzar como máximo el 75 % del aforo del espacio con un máximo de 100 personas.

Por otro lado, en las bibliotecas también se determina un aforo máximo del 75 % siempre y cuando se pueda garantizar la distancia de seguridad de 1,5 metros entre usuarios. Estarán disponibles los ordenadores y otros materiales para consulta y los niños menores de 12 años deberán estar acompañados por un tutor que vigile el cumplimiento por parte del menor de estas medidas de distanciamiento social. La gran novedad en este área es que se reduce notablemente el tiempo de cuarentena que ha de pasar el material de préstamo (libros, videos, cd, etc), que queda en 72 horas frente a los varios días que ahora tienen que transcurrir entre la devolución de un libro y el préstamo de ese mismo ejemplar a otro lector.