El Castellón, a pesar de la imponente remontada, no ha podido terminar de explotar un calendario benigno con los dos empates, a última hora, frente a dos rivales en zona de descenso. Ahora, Kiko Ramírez, que tiene en la bicicleta una de sus pasiones, visualiza lo que viene por delante, la conquista de las altas cumbres que pueden acabar con los albinegros en la promoción de ascenso... o con una indeseable pájara que les descuelgue de los puestos que les permitan volver a luchar por el regreso a Segunda B.

En 10 jornadas, aproximadamente dos meses y medio, el Aubisque, el Tourmalet, Alpe d’Huez... a la vista. Sí, porque los orelluts han de enfrentarse a los 10 primeros de la clasificación (en realidad, nueve, al ocupar la cuarta plaza provisional) en su totalidad, a excepción del Torre Levante. Además, queda algún partido con morbo (como el Borriol, el próximo en pasar por Castalia). A priori, si se puede hablar de encuentro tranquilo, solo el Castellón-Muro (colofón, además, a las fiestas de la Magdalena) porque todo lo demás causa vértigo.

CUESTA TRAS CUESTA // Una sensación, la del mal de altura, agudizada porque los desplazamientos son realmente complicados. Los dos más inmediatos, a Ontinyent y Atlético Saguntino, que pasan por ser los mejores locales, con 27 y 30 puntos en 10 encuentros (es decir, el Nou Camp de Morvedre solo conoce la victoria de los romanos en lo que llevamos de temporada). Eso sin olvidar que los notables resultados que el Villarreal C ha cosechado ante su público (6-0 al Ontinyent, 5-2 al Alzira, 3-0 al Saguntino...), donde tampoco conoce la derrota. La Magdalena y Los Arcos tampoco pasan, precisamente, por ser territorios accesibles, sobre todo para el Castellón, donde, históricamente, tanto ha sufrido (en ocasiones, más allá de cuestiones meramente futbolísticas) tanto en Novelda como en Orihuela.

Eso sí, no puede considerarse que este Castellón sea un flojeras lejos de Castalia; más bien todo lo contrario. Es el equipo que más tiempo lleva sin perder a domicilio, pues ya habrá superado los cuatro meses sin perder lejos de Castalia. Seis desplazamientos que abrió (y, hasta la fecha, ha cerrado) con sendos empates (Muro y Jove Español, respectivamente), intercalados por cuatro victorias consecutivas (Torrevieja, Elche B, Benigànim y Paterna). Es decir, su último traspié como visitante fue en Alzira, el 27 de septiembre.

LOS CARA A CARA // Otra asignatura pendiente, que arrastra de la primera vuelta, cuando esta secuencia de partidos, la mayoría todavía con Ramón María Calderé al frente, se saldó con esa sequía de triunfos que le acabó costando el cargo, es la necesidad de decantar de su lado los distintos goal-average particulares.

Porque, precisamente del top-10, el Castellón solamente presume de los triunfos contra Torrevieja (0-1) y Elche B (2-3). Eso sí, la mayoría de los duelos directos son ganables --igualó en Castalia sin goles frente a Saguntino o Villarreal C; y perdió por la mínima frente al Ontinyent y Orihuela en casa (2-3 y 1-2, respectivamente), así como en Alzira (2-1)--. Casi imposible está recuperar al Novelda el 1-4 del adiós a Calderé.

En definitiva, dos meses apasionantes y definitorios, en los que más vale apretarse los cinturones. ¡Agárrense, que vienen curvas! H