Se habla muy poco de fútbol estos días en el entorno del Atlético. El posible fichaje de Griezmann por el Barcelona monopoliza los temas de conversación a pocas horas de luchar por la Europa League (mañana en Lyón, 20.45 horas, contra el Olympique de Marsella). Para su cuarta final continental como entrenador rojiblanco, Simeone tiene disponible a toda la plantilla, recuperados de sus dolencias tanto Giménez como Vitolo.

El sentimiento que sobrevuela todo el entorno es que la marcha del galo es inamovible. Los 100 millones de euros de su cláusula de rescisión son apetecibles para un gran club y el posible deseo del jugador de dejar la disciplina rojiblanca puede ser la puntilla.

Antes de que el equipo viaje este martes, en el último entrenamiento en Madrid, Simeone pudo contar con normalidad con Giménez, que no jugó el sábado en Getafe aquejado de molestias musculares. Sí lo hicieron muchos posibles titulares en Lyón, desde Oblak en la portería y la delantera Costa-Griezmann, hasta una medular formada por Gabi, Thomas, Koke y Saúl, pasando por Godín en el eje de la zaga.

La única duda

Vitolo, aquejado de una lesión muscular en los isquiotibiales, es la incógnita, pero el canario también se ha entrenado con normalidad junto al resto del grupo y, en consecuencia, entró en la convocatoria para enfrentarse al Olympique de Marsella.