El FC Barcelona se convierte en el primer club de la Liga española en aplicar un ERTE a su plantilla profesional y a todos sus trabajadores para combatir la crisis económica provocada por el coronavirus. No solo eso. Es el primer gran club europeo de altísimo nivel que acude a esta vía legal para intentar garantizar su viabilidad al pasar la pandemia.

La directiva trata de minimizar el impacto económico de la crisis y los más afectados, porque cargan con el 61% del presupuesto, son los deportistas y en particular los futbolistas.

El plan consiste en reducir en un 70% el salario de todos sus profesionales mientras se mantengan las competiciones paralizadas. Luego recuperarán el 100% una vez regrese la normalidad. La rebaja que plantea el club azulgrana es incluso superior a la que medita la FIFA para los clubs, que habla de la mitad de la ficha.