El Barcelona dio ayer un golpe a la Liga, dejando muy bien encarrilado el título de campeón de Primera División, tras su autoritaria victoria en El Molinón ante un Sporting de Gijón que plantó cara, en especial en la primera mitad, hasta que le duró el fuelle.

Leo Messi, que fue el gran protagonista del partido, adelantó a los azulgrana a los 25 minutos, tanto contrarrestado por los locales dos minutos después por medio de Castro. Pero en el 31 Messi volvió a fusilar a Cuéllar (1-2 al descanso).

En el segundo acto, Luis Suárez falló un penalti (62’), pero sentenció con el 1-3 en el 67. H