Llegó el momento, el debut, en competición oficial, en Castalia. El Castellón lo hará delante de miles de espectadores, con todo lo que ello comporta. Así que la rueda de prensa de Frank Castelló, casi en vísperas de recibir al Buñol (este domingo, a las siete), giró, durante una gran parte de la misma, respecto a ese ambiente de euforia en el entorno.
«Estamos intentando tocar todos los palos que podemos controlar. Uno de ellos es avisar al jugador para que cuando alce la cabeza, sepa que puede haber 9.000 aficionados. Que cuando salgamos por la escalera al campo, nos recibirán de una manera espectacular. Que no nos tiemblen las piernas por jugar delante de tanta gente», advirtió el bocairentí. «Hay que buscar la parte positiva y que esto nos sirva, que no nos genere más nerviosismo», comentó. «Ya tenemos el gusanito de la competición, que va a ayudarnos», destacó el técnico.
Castelló fue un poco más allá al hablar de la ilusión, en algunos casos desmedida, en el entorno, en contraposición a lo que piensa el vestuario: «Se está confundiendo que tengamos 9.000 abonados con que debamos ganarlo todo». «Nosotros no tenemos ninguna euforia. Estamos súper tranquilos y muy ilusionados, porque nadie nos ganará en ilusión», destacó antes de subrayar la «humildad» de la plantilla.
El entrenador orellut volvió a admitir, cinco días de inaugurar la competición con una sufrida victoria en casa del filial del Elche (0-1), que las sensaciones no fueron demasiado satisfactorias: «No hicimos nuestro mejor partido, pero ganar te da un plus».
EL SUSPENSE // Castelló desgranó las dudas que le rondaban en la cabeza a algo más de 48 horas del estreno liguero en casa. «Arturo está tocado por el fuerte golpe del domingo y hoy [por ayer] ha entrenado relativamente bien», introdujo. «Marenyà arrastraba un dolor de garganta y Kike Ferreres tiene el mismo problema», añadió, recordando que ambos fueron «compañeros de habitación en Elche», donde los albinegros hicieron noche antes del duelo en la Ciudad Deportiva Díez Iborra». «Han entrenado los dos, pero con reservas», apostilló sobre el lateral izquierdo burrianense y el centrocampista vila-realense.
Por último, el preparador albinegro, aunque por un motivo distinto, se refirió también a William: «Aún no tiene el tránsfer, todavía lo estamos esperando».
Por todo, abrió la puerta a variaciones en la alineación inicial: «Es posible que haya algún cambio respecto a la semana pasada. «Más que un once reconocible, podemos hacer dos», matizó. «La plantilla la hemos confeccionado nosotros. Lo que yo quería, está aquí. Somos 20 futbolistas y, con Abraham, 21... y todos pueden jugar», concluyó Castelló.
