Aun por debajo de cifras de otros partidos de anteriores fases de ascenso a Segunda B, el Castellón-Peña Sport registró, con mucha holgura, la mayor afluencia de público del fin de semana, en cuanto a los encuentros de ida de la segunda y penúltima eliminatoria de los play-off: Castalia congregó a unos 5.000 espectadores, de los que cerca de un millar desafiaron a David Cruz y accedieron gratis, como media de protesta en contra de la gestión del presidente.

El siguiente encuentro con más público, de los otros 18, fue el Villarrobledo-Náxara, con 3.700. Cifras significativas también en el Ontinyent-Arcos (3.000) o el Écija-San Fernando (2.800), este último disputado el sábado.

El Castellón-Peña Sport se movió en cantidades similares a las del Castellón-Poblense, ida de la anterior ronda. Ese día, incluso pagaron los jugadores del fútbol base albinegro.