El Castellón tiene en su punto de mira a varios futbolistas. En especial, el club de la capital de la Plana pretende reforzar la retaguardia durante el próximo mes de enero, con el objetivo de paliar las carencias en la confección de la plantilla en el capítulo de defensas y centrocampistas de un corte más defensivo.

Desde la llegada de Sergi Escobar al frente del primer equipo, tanto él como el director general del club, Jordi Bruixola, han realizado una radiografía de la plantilla, la cual, como no ha ocultado en momento alguno el míster, «tiene demasiados ofensivos y pocos jugadores de corte defensivo».

Es por ello que, una vez llegado el parón por Navidad, la entidad de la capital de la Plana se ha puesto manos a la obra, con vistas a reforzar varias zonas del campo en las que el equipo tiene carencias en estos momentos.

Partiendo de la premisa de que para poder fichar habrá que dar bajas, que en ello también se está, un mediocentro defensivo y un defensa que pueda actuar a la vez como central y lateral, son dos de las pretensiones que Escobar ha solicitado a Bruixola.

Es por ello que el CD Castellón ha puesto en el punto de mira en el centrocampista valenciano Marc Castells, que ya estuvo hace dos campañas en el club orellut, y que milita en estos momentos en el Zirka, de la Primera División de Ucrania.

negociaciones / Pese al nivel, y el sueldo, de su actual equipo —ahora en Ucrania hay parón—, Castells y el Castellón se han sentado para analizar su posible incorporación, en la que ambas partes tendrán que ceder para llegar a un entente, es decir, los albinegros hacer un esfuerzo económico y el de Sueca rebajar sus pretensiones, ya que nunca se le podrá pagar el sueldo del Zirka.

bueso, en castalia / Pol Bueso estuvo en Castalia el pasado miércoles, en Tribuna Baja, muy atento a todo lo que sucedía. Pese a militar en el Hércules (2ª B), su amistad con Dealbert y las ganas de volver a casa —fue padre recientemente— podrían convertir al castellonense en un refuerzo para la segunda vuelta.