A diferencia de algunos clubs de Primera División que han optado por disputar los partidos que resta de la presente temporada y los de la 2020/21 que hayan de jugarse a puerta cerrada en los estadios de sus ciudades deportivas, el Villarreal mantiene su intención de seguir jugando en el Estadio de la Cerámica aunque sea sin público.

La directiva es partidaria de mantener sus partidos como local en el feudo villarrealense por comodidad para los equipos pese a que los gastos que supone abrir su estadio sean mayores que los del Mini.

De este modo, y a falta de que pueda haber un cambio de opinión una vez se retome la competición, el Villarreal regresará a La Cerámica y no hará como, por ejemplo, el Real Madrid, que ya tiene los permisos pertinentes de LaLiga y la RFEF para disputar los seis partidos pendientes en su ciudad deportiva. Para ello, ha mejorado la iluminación del estadio, ha instalado nuevos sistemas de publicidad y ha implementado el VAR.