Dos goles de Cristiano Ronaldo, en el tramo final de cada tiempo, dieron la victoria al Real Madrid en Ipurua, donde sobrevivió con eficacia al ímpetu de un meritorio Eibar.

La habilidad de Ronaldo para aparecer en los momentos decisivos (ms.33 y 84) ofrecieron al Real Madrid tres puntos con los que mantenerse enganchado en LaLiga, sin dejarse ir, pese a la distancia que le separa de la cabeza y a la euforia que ha provocado su actuación del martes en París.

Y eso que el arranque del Eibar fue espectacular, con unos primeros minutos en los que atrincheró en su área a los de Zidane, que se encontraban sin espacios para hacer su fútbol. Pasaban los minutos y el Real Madrid trataba de encontrar huecos a la espalda de la adelantada defensa armera, aunque sin demasiado éxito, por la intensidad local.

Zidane tuvo que hacer el primer cambio de forma obligada antes de la media hora, dando entrada a Nacho por un Varane que no se recuperó de un choque fortuito de cabezas con Kike García. Bale y Ronaldo tuvieron su doble ocasión en una jugada aislada de los de Zidane, pero ninguno de los dos fue capaz de aprovechar el balón largo de Marcelo.

Eso sí, Cristiano puede perdonar una, pero no dos, y el portugués aprovechó de una forma sensacional un magnífico pase con el exterior de Modric, tras un error de Arbilla, para definir con maestría. Parecía demasiado castigo para un Eibar que lo estaba dando todo en el terreno de juego, aunque aún quedaban minutos para el descanso.

El segundo tiempo arrancó con un Real Madrid más tranquilo por el gol a favor, buscando calmar el encuentro ante un Eibar que no dejaba de presionar.

Pero los locales no dejaron de creer, y Ramis encontró el empate en el minuto 50 cabeceando de forma espectacular un córner sacado por Pedro León. Se abría otro duelo y ambos se lanzaron en busca de los tres puntos.

El Eibar se vino arriba con la igualada, pero le faltaba el último pase para poder hacer daño. Kike García tuvo su opción a la contra para el final en un mano a mano con Navas, pero el mal control evitó una mejor opción para el ariete. Y es que, si algo le sobra al Madrid, es pegada y Cristiano cabeceó a la red el gol de la victoria madridista ante el Eibar.