Se impuso la lógica en el Masters 1.000 de Madrid y el número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, se impuso al castellonense Roberto Bautista por 6-2 y 6,1, llegando así los cuartos de final.

El tenista de Belgrado no dio opción a situaciones inesperadas y después de sus cuatro éxitos en el 2016, incluido el Abierto de Australia --el único Grand Slam disputado hasta el momento--, demostró que quiere alzarse con un nuevo título en la Caja Mágica.

Bautista, por su parte, mantuvo el tipo mientras pudo. El tenista de Castellón, que disfruta de uno de sus mejores momentos de su carrera, recompensado en el presente ejercicio con los triunfos e Auckland y Sofía, se sostuvo durante los cuatro primeros juegos del partido. No le dio para más a Rober, que pudo romper el saque de su rival en el tercer juego. No aprovechó las ocasiones y con 2-2 el número uno del mundo se apuntó cuatro juegos consecutivos para cerrar la manga.

El provincial palió la sangría en el inicio del segundo set. Pero Djokovic desniveló la situación en el tercer juego, que rompió para encarrilar la victoria final.

Roberto Bautista, que cuenta por derrotas sus partidos con el balcánico --cuatro partidos con este de Madrid y otras tantas caídas--, decayó progresivamente incapaz de hacer frente al acelerón de su rival, que ganó después de una hora y ocho minutos para alcanzar los cuartos de final.

Con el adiós de Bautista, que llegó a ser semifinalista en el 2014, el tenis español en Madrid queda al amparo de Rafael Nadal. Previamente, David Ferrer perdió ante el checo Tomas Berdych. H