Sergi Escobar, a pesar del 0-3, acabó con la garganta rota. Es el precio que ha debido pagar por una trayectoria de 20 años en los banquillos, junto a su carrera como docente (es profesor de Educación Física), lo que en un futuro próximo le obligará a pasar por el quirófano. Espera que sea al final de la temporada, cuando se haya quedado completamente sin voz... debido al ascenso.

De entrada, el primer paso hacia ese objetivo es contundente. El 0-3 en Novelda «es el guión perfecto que todos queríamos». Sus hombres culminaron «el plan perfecto». «Habíamos planteado este tipo de juego, un ataque buscando mucho el rechace, porque Cubillas es tremendo. El equipo ha estado muy junto, con una buena presión tras pérdida, con la intensidad que requería el partido y nosotros mismos, que es lo que vamos a pedir siempre a los jugadores», profundizó. Escobar añadió que «apenas nos han creado peligro», aunque rápidamente matizó que «el resultado igual es abultado para lo que el Novelda nos ha exigido».

DOS SALIDAS MÁS IGUALES // De La Magdalena a El Palmar y, de ahí, a El Perdiguer. Debuta con tres salidas consecutivas muy similares. «Este resultado nos viene muy bien para reforzar este tipo de juego, aunque en Castalia propondremos otra cosa», enfatizó.

Escobar matizó que sus primeros descartes fueron obligados. Enrique supera una lesión muscular, Forner acumula mucho desgaste, «Fonte no ha entrenado con normalidad esta semana», «Zarzo ha estado dos días sin trabajar por una infección bucal» y «William necesita mejorar físicamente». A continuación, el preparador almazorense declaró que «este primer mes vamos a intentar que el mayor número de jugadores se suba al tren», repartiendo minutos y oportunidades. «El domingo que viene igual hay dos o tres cambios en la alineación...», anticipó en relación al encuentro frente al Borriol. Paralelamente, él, junto a su cuerpo técnico, continuará con su «análisis de situación» con charlas individuales con los futbolistas.

ELOGIOS // Escobar no pudo dejar pasar la ocasión de piropear a los dos jugadores cuya situación más ha cambiado con su ascenso. Siete días atrás, Pedra y Sales vieron el empate frente al Olímpic desde la grada. «Me quito el sombrero con el partido de Iván», dijo antes de destacar «el ratito de Albert», «sus minutos de calidad».