Jarni (Cakovec, 1968) fue una de las estrellas de la Croacia que alcanzó las semifinales del Mundial de 1998 tras golear a Alemania. Internacional en 81 ocasiones y exjugador del Madrid, Juventus y Betis, entre otros, vive en Split y busca equipo para entrenar tras pasar el último año y medio en Hungría.
-¿Está disfrutando la Eurocopa?
-Me esperaba mucho más. He visto pocos partidos buenos. La gente se prepara para defender y jugar al contragolpe. Se arriesga poco. Solo me gustó de verdad el Inglaterra-Rusia. De momento, es una decepción.
-¿Tampoco le gusta España?
-No mucho en el primer partido, le faltó ser más directa. En el segundo me gustó más. España siempre tiene la misma idea, pero no se puede entrar con el balón en la portería. Diría que España es el Barça, pero sin Iniesta el tiki-taka fallaría. Es el mejor del equipo, sin duda. Cuando se ponen a mover el balón sin solución, él siempre encuentra algo. Tiene una influencia similar a la de Modric.
-No le noto muy convencido con el juego de ‘la Roja’
-Yo soy partidario de jugar más por las bandas, me gusta el fútbol más vertical, más directo. Hay que llegar con más facilidad al área, más rápido. Pero el tiki taka también tiene cosas buenas. Cansa al rival. Por ejemplo, hace cuatro años, en la final de la Eurocopa en Kiev, me preguntaron por mi pronóstico. Dije que ganaría bien España, simplemente porque Italia llegaba agotada. Ellos juegan con un 3--5-2 que desgasta muchísimo. España descansa más. El fútbol también ha cambiado. Antes había extremos y laterales que desbordaban más en el uno contra uno.
-¿Siente vergüenza de los ultras de su país? ¿Existe solución?
-Es un problema muy profundo, no es de ayer, es de hace varios años. La gente que manda debe tener mano dura, como la tuvo Thatcher con los ingleses. El gobierno croata está haciendo muy poco para evitar esto. Es una vergüenza que no puedas ir tranquilo con tu niño al campo. Nunca sabes lo que puede pasar. H
