El Villarreal juvenil se quedó a las puertas del título en la prestigiosa Dallas Cup. El conjunto que dirige Miguel Ángel Tena no pudo poner el broche de oro a su excelente participación en el torneo estadounidense, en el que solo cedió en el último encuentro y en la tanda de penaltis ante el Tigres mexicano, que levantó el trofeo de campeón después de 120 intensos minutos y una dramática tanda desde los 11 metros en la que los aztecas se mostraron más eficaces.

El Villarreal no pudo mantener la ventaja que le dio Diego Collado en el minuto 40, que culminó una excelente jugada individual con un derechazo pegado a la cepa del poste que se le coló al meta mexicano. El propio Collado, ya en la segunda parte, pudo aumentar la distancia, pero su zurdazo chocó conta la madera de la portería del Tigres (m. 72).

A 10 minutos para la conclusión, jarro de agua fría para los groguets. El Tigres, ya a la desesperada en busca de la igualada, encontró premio con el tanto de Enrique Prieto. El Villarreal pareció acusar el golpe y se salvó del segundo en contra gracias a los reflejos de su portero Filip Jorgensen, que entró en los segundos 45 minutos. En el último minuto de la prórroga el árbitro obvió un claro penalti sobre el amarillo Robles que hubiera evitado el lanzamiento de penaltis.

DESACIERTO FINAL / En la lotería apareció la cara más desacertada de los chavales de Tena. El Tigres falló su primer lanzamiento, pero anotaría los tres siguientes. En el bando del Villarreal, a Robles, Pereiro y Adriano se les hizo la portería mexicana muy pequeña y el portero rival, Alan Flores, demasiado grande.