El fútbol todavía protagoniza de vez en cuando historias que más bien podrían ser de cuento de hadas. A sus 34 años, si a Santi Cazorla le hubieran dicho hace seis meses que volvería a rendir en un club de la élite del balompié europeo, él habría replicado sobre el estado de embriaguez de la persona que realizara esa afirmación. A él le bastaba con volver a correr... pero todo crack que se precie no se conforma con lo mínimo. Y decidió intentarlo.

Tras desvincularse del Arsenal, la cercanía y amistad que une al asturiano con los responsables directos del Villarreal CF, en especial con el trío de cabezas visibles: Roig, Negueroles y Llaneza, Cazorla decidió aceptar el reto de intentar ponerse a punto en pretemporada y, por qué no, aspirar a volver a sentirse futbolista.

Al Mago le salió bien la jugada. En verano, cuando llegaron los primeros bolos estivales, ya comenzó a dar muestras de que su fichaje real podría cuajar. Y no nos referimos a la firma del contrato, sino a que la posibilidad de poder volver a ver al otrora Cazorlita en el Estadio de la Cerámica no era un brindis al sol.

El genio asturiano se puso manos a la obra y fue recuperando poco a poco tanto el tono físico como el futbolístico. Y ha rendido a tan buen nivel hasta tal punto que es una de las pocas alegrías que hasta la fecha ha experimentado el Submarino en una mala primera mitad de campaña.

EXHIBICIÓN A SEGUIR / Si ya con Javi Calleja ofreció bastantes buenos partidos, dentro de la vulgaridad del equipo, Santi, que no jugó de inicio en ninguno de los dos primeros partidos con Luis García al frente, sacó su mejor repertorio para ofrecer un recital ante el Real Madrid, siendo el artífice de los dos goles del 2-2 final.

Una obra de arte que debe ser el punto de partida tanto para él como para sus compañeros y comenzar a remontar en la clasificación, ya que este Villarreal debe aspirar a plazas europeas.

OCHO AÑOS DESPUÉS / Autor de los dos tantos del Submarino en el empate ante los blancos en el Estadio de la Cerámica el pasado jueves, Santi Cazorla marcó en LaLiga más de ocho años después de haber anotado su último tanto con el conjunto amarillo.

Tras su vuelta al Submarino este pasado verano, club que abandonó en 2011 para fichar por el Málaga y más tarde para continuar su carrera en el Arsenal inglés —donde es un ídolo y llegó a ser capitán—, el asturiano no había conseguido ver puerta pese a haber participado en trece de los dieciséis encuentros disputados hasta ese momento.

La última vez que el futbolista internacional español había batido la meta contraria en LaLiga con la camiseta amarilla fue el pasado 19 de diciembre del 2010, cuando anotó uno de los tres goles en la victoria de su equipo por 3-1 ante el Real Mallorca.

Desde entonces, el jugador asturiano no había visto puerta ni en los 21 partidos que disputó hasta el final de aquella temporada, ni en los 13 jugados en el presente curso 2018/19.

EL 6º GOLEADOR HISTÓRICO / Los dos goles anotados ante el Real Madrid le sitúan con 27 tantos en la sexta posición de artilleros históricos del Villarreal, por delante del brasileño Nilmar, y con 193 partidos disputados está cada vez más cerca del club de los 200 del que forman parte tan solo cinco jugadores: Bruno Soriano, Marcos Senna, Mario Gaspar, Cani y Arruabarrena.